Este fin de semana se presentaron manifestaciones de grupos xenófobos chilenos rechazando con violencia a los inmigrantes venezolanos que se encontraban en conjunto acampando en las calles de Iquique, al norte de Chile.
Los manifestantes se tomaron la avenida Aeropuerto y Las Rosas, donde intimidaron a los venezolanos y procedieron a quemar las pertenencias de al menos un centenar de ellos. Los medios de prensa locales indican que los chilenos anti inmigración también incendiaron las carpas, dejando sin techo a las familias venezolanas que sobrevivían con sus pocas pertenencias mientras esperaban ayudas humanitarias del Estado.
Entre los objetos incinerados quedaron artículos de aseo, carriolas de bebés, juguetes, ropa, artículos de cocina, sábanas, almohadas y, según los testigos en la zona, al parecer, un cachorro miembro de una de las familias también habría sido afectado por el fuego o humo de los incendios.